Consejos para un textil hogar saludable.

1.- Ventila con más frecuencia las habitaciones: Al estar más tiempo en las estancia de la casa, estas necesitan ventilarse un poco más, con 2 ó 3 veces será suficiente, con un tiempo de 5 minutos.

2.- El lavado con agua tibia es más recomendable: siempre que la prenda lo permita, lo lavaremos a la máxima temperatura que indica.

3.- Plancha toda la ropa a ser posible con vapor: En las etiquetas tambien indica la temperatura de planchado, pero ahora aquellas prendas que no se planchaban recomendamos ahora hacerlo.

4.- Airea la ropa de cama antes de volverla a poner: Antes de volver a hacer la cama, agitar el relleno, sábanas encimeras, sábanas bajeras, etc.

5.- Cambia la ropa de cama cada 3 / 4 días: Aunque el cambio se suele hacer cada semana, es mejor realizar ahora más cambios.

6.- Una toalla por persona, incluida la de lavabo: En las toallas de mayor tamaño como la de las sábana y ducha hay una toalla para cada persona, tendremos que hacerlo también con la de lavabo y la de tocador y lavarlas más a menudo.

7.- Pon atención al colchón, utiliza protectores: El colchón es donde pasamos un tercio de nuestro día, y para tener un mejor cuidado recomendamos los protectores, fundas y cubrecolchones, que muchos de ellos son antibacterias.

8.- Cambia y lava cada día los paños de cocina: Esta prenda con la que nos lavamos las manos a diario, tenemos que ponerle especial atención para cambiar y lavar diariamente.

9.- Lee con detalle las etiquetas del fabricante: Para un buen cuidado de la prenda, lee con atención los símbolos de lavado de las etiquetas.

10.- Utiliza el pijama sólo para dormir: Aunque es una prenda muy cómoda, es aconsejable no ir con ella todo el día, ya que vamos a utilizar la misma prenda tanto de día como de noche.

11.- Usa detergentes suaves y con Ph neutro: Son aquellos que tienen entre 7 y 7,9 de pH y suelen ser poco corrosivos.

12.- Utiliza lejía para superficies no para textil: La lejía es un buen desinfectante, pero no para las prendas textiles convencionales, ya que la decoloran y estropean el tejido.